Tras el ataque de Hamás a Israel el sábado pasado, es necesario brindar una mirada más profunda del conflicto entre Hamás e Israel.

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Invitados:

Kevin Ary Levin. Sociólogo especializado en Medio Oriente.
Desde: Buenos Aires

Aaron Glatz. Analista internacional en Medio Oriente.
Desde: Miami

Tras el ataque de Hamás a Israel el sábado pasado, es necesario brindar una mirada más profunda del conflicto entre Hamás e Israel.

Las implicaciones regionales son enormes: Hezbollah, la facción chiita libanesa que libró una guerra brutal contra Israel en 2006, intercambió fuego de cohetes y artillería con Israel, lo que generó temores de un conflicto en dos frentes. La Liga Árabe y Qatar culparon a Israel, mientras que se puso en duda el tan esperado acuerdo de paz entre Israel y Arabia Saudita. Mientras tanto, Irán estaba en el centro de la cuestión, y The Wall Street Journal citó fuentes anónimas para informar que Teherán trabajó con Hamás durante meses para planificar el ataque, aunque funcionarios estadounidenses le dijeron a CNN que no podían confirmar ningún vínculo de ese tipo.

” Los precios del petróleo subieron más del 5%, impulsados por los temores de inestabilidad en Oriente Medio”.

THE NYTIMES: Muchos expertos creen que Hamás atacó a Israel en parte para socavar un acuerdo entre Israel y Arabia Saudita. Un acuerdo así podría aislar a Irán, el patrón de Hamás, y podría conducir a una inyección de dinero saudí para la Autoridad Palestina, un grupo más moderado que Hamás (como explica Thomas Friedman en esta columna). Pero si los recientes ataques de Hamas llevan a Israel a reducir la Franja de Gaza a escombros en respuesta, Arabia Saudita tendrá dificultades para aceptar cualquier tratado.

“Esto ralentizará considerablemente, si no acabará, el acuerdo saudí de los Acuerdos de Abraham”, dijo al Times Mara Rudman, ex diplomática estadounidense.